Neymar o Kun. Esa es la gran duda que maneja ahora el madridismo. Coinciden en precio, 45 millones de euros, pero sus cualidades son totalmente distintas.
El primero está llamado a ser el sustituto de Pelé. Una etiqueta muy normal en cualquier joven promesa que emana de las favelas brasileñas. El joven tiene calidad, y mucha. Sus bicicletas y filigranas recuerdan a la magia de Ronaldinho, o al díscolo Robinho. Y ahí, es precisamente donde surje la duda del madridismo.
La mala experiencia habida con los brasileños no deja tranquilos a los merengues. Lo malo es que sus peinados extravagantes y sus shows -los que monta en cada celebración o cuando no quiso pasarle el balón a sus compañeros por no dejarle tirar un penalti- no ayudan. Pero si nos atenemos a su forma de jugar, hay que decir que este Neymar tiene algo distinto.
Es verdad que gambetea como Robinho e incluo da la sensación en ocasiones de pecar en exceso de este recurso. Pero su evolución en el último año ha sido bestial. Su perfil cada vez se acerca más al de Cristiano Ronaldo. Un jugador vertical que tiene entre ceja y ceja la portería.Y es precisamente en esa dirección, en la que tienen que evolucionar este tipo de jugadores -no hay más que mirar a CR7 en sus primeros años y verle ahora-.Otro cantar, es su comportamiento. El chaval es uno de los mejores amigos de Robinho y los madridistas no quieren volver a vivir otro caso así. El tiempo dirá lo que pasa con este jugador.
Por otro lado está Kun. No voy a decir nada nuevo de él. Después de Messi y Ronaldo, no hay jugador más decisivo en este campeonato. Su fichaje se ha estancado. El Atleti tiene miedo a que el socio se le eche encima si traspasa a su estrella al enemigo número uno. El Madrid por su parte mantiene la calma, así lo aseguró Florentino Pérez: "No iremos a por Kun, de momento". Y mientras Agüero compra una casa en la Finca -será nuevo vecino de CR7- y asegura que se quedará en España. Sus representantes afirman ofertas de la Juve y del Chelsea. Y cualquier ex jugador o entrenador le da consejos para su destino cada día.
Cada uno puede hacer sus lecturas. A mí, sólo me recuerda al juego de marionetas que realiza cada verano Florentino Pérez. No hay más que echar la vista atrás y acordarse del "Never Never" de Beckham, o el fichaje a última hora de Ronaldo (el gordito), el traspaso con calúsula de Figo, etc...
Sólo puedo decir que el verano acaba de empezar y parece que será muy largo.
